Encontrar a la primera el hotel al llegar a una ciudad que no conocemos, o llegar al restaurante donde hemos quedado nunca ha sido tan fácil. Como ejemplo, desde nuestros smartphones, las aplicaciones de geolocalización de nuestra red social favorita (como Facebook Places, Twitter Places o Tuenti) nos permiten compartir nuestra ubicación y localizar al amigo que nos espera. A la vez, podemos buscar la parada de metro más cercana para ir juntos al partido de fútbol, calcular el tiempo que tardaremos en llegar o encontrar los locales de ocio cercanos al estadio.
Dos son los elementos clave de este desarrollo: la extensión de las tecnologías móviles y la conexión a Internet y a las redes sociales. Según el Estudio sobre la seguridad en las conexiones inalámbricas y móviles en los hogares españoles del 3er trimestre de 2010, casi 3 de cada cuatro teléfonos móviles incluye tecnología 3G o GPRS en el mismo (es decir, conexión a Internet) y, como recoge IAB Spain, 1 de cada 3 tecnología GPS que permite la georreferenciación.
¿Qué reporta la geolocalización a los usuarios de redes sociales? Para el 46% de usuarios que alguna vez nos hemos conectado a nuestra red favorita desde el móvil, es importante lo que opinan nuestros contactos en cuanto a sitios donde comprar o visitar, restaurantes a los que ir, cosas que hacer en el tiempo de ocio… en tiempo real y desde nuestra ubicación en cada momento. A su vez, la geolocalización es una herramienta utilizada por las empresas a la hora de realizar campañas de marketing dirigido, de tal forma que a la información que nos proporcionan nuestros contactos se une la que nos ofrecen las empresas: transportes en las cercanías, ofertas para canjear en establecimientos próximos, etc.
Ahora bien, el uso de esta tecnología puede entrañar una serie de riesgos de privacidad y seguridad. Algunos ejemplos concretos son:
- Las geoetiquetas o datos de localización manejados estas redes sociales pueden revelar información personal y permitir que terceras personas se apropien de la misma. Y no sólo nuestra información: el hecho de publicar dónde estamos, puede conllevar el robo físico (si por ejemplo, no estamos en casa).
- Quizás el mayor riesgo resida en el tratamiento irresponsable de los datos que incluimos en estas redes sociales por parte de empresas que tienen acceso a ellos, bien cediendo estos datos a terceros sin nuestro consentimiento expreso, bien vulnerando la configuración de privacidad de nuestros perfiles, etc.
- La ingeniería social también está presente en las redes “neosociales”. Por ejemplo, un usuario puede hacerse pasar por otra persona y entablar contacto con otros usuarios, ocultando algún interés malintencionado.
- También existe un riesgo de malware asociado a la descarga de aplicaciones de geolocalización en nuestros terminales, si dicho programa está infectado. Este malware puede provocar fallos en el funcionamiento, intercepción de la comunicación (los llamados ataques “man-in-the-middle”), etc.
En la página web (http://www.inteco.es/Seguridad/Observatorio) puedes descargarlos o de lo contrario puedes descargarlo desde este link: guia_sobre_seguridad_y_privacidad_de_las_herramientas_de_geolocalizacion
fuente: inteco.es
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